jueves, 14 de octubre de 2010

LA TEORÍA DE LAS VENTANAS ROTAS

Me han recomendado esta entrada de un blog que explica de manera amena e interesante la necesidad de mantener las cosas, más concretamente las relacionadas con los espacios urbanos y el transporte público:

LA TEORÍA DE LAS VENTANAS ROTAS

"En 1969, en la Universidad de Stanford (EEUU), el Prof. Phillip Zimbardo realizó un experimento de psicología social. Dejó 2 autos abandonados en la calle. Eran 2 autos idénticos: la misma marca, modelo y hasta igual color. Uno lo dejó en el Bronx, por entonces una zona pobre y conflictiva de Nueva York y el otro en Palo Alto, una zona rica y tranquila de California. Dos autos idénticos abandonados en dos barrios con poblaciones muy diferentes... (leer más)".

Coronado.

6 comentarios:

  1. Si es cierto que el descuido llama al desperfecto y éste al vandalismo, yo me pregunto: ¿De donde surge ese descuido? Enfocandolo un poco al urbanismo y los planes, creo que todo esto surge a causa del político de turno, que se esfuerza en demostar lo que hay sin contarnos toda la verdad, es decir, como interactua la sociedad con lo que nos está enseñando. Veo un gran interés en elaborar listas de todo lo que han propuesto y cumplido, pero sin embargo, en ese afán por dotar a cualquier lugar de todo lo existente se olvidan de que exige un gasto en mantenimiento que se hace obligado, para evitar llegar a la situación que nos expone el estudio. Por lo tanto, habrá que actuar en todo momento con una lógica y una racionalidad y no por el "cuanto más, mejor", siempre en busca de un equilibrio y atendiendo a unas fases coherentes, no vale el "YA y AHORA" cada cosa, lleva su tiempo de adaptación dado que cambiar una dinámica y costumbres nunca ha sido algo sencillo. Pienso, que es importante una reflexión sobre el tema, para que todo se mantenga tal y como fue diseñado.

    Por cierto, se escribe Mobiliario.
    Fernando Payán Villarrubia

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  2. Como bien dice Payán, los políticos no tendrían que “enumerar“ todo lo que hacen, sino que deberían hacerlo con todo lo que se mantiene. Es preferible, en mi opinión, tener poco pero bien cuidado y que funcione, a tener mucho pero que realmente no esté nada en buenas condiciones.
    Por otro lado, en cuanto a lo que respecta al por qué las personas rompen el mobiliario, la mayoría de las veces se debe a su ignorancia, ya que el acto suele ir acompañado de: “da igual, si esto lo paga el ayuntamiento”…
    Ante esto se puede hacer muy poco, ¿Qué opciones hay? ¿No hacer nada? Así nos fastidiamos los demás, porque supongo que a los que lo destrozan les importará bien poco lo que haya o deje de haber.

    Juan Pedro Rubio Babiano

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  3. Por cierto puestos a corregir por un error ortográfico revisa lo tuyo que las tildes en el español también existen.

    FIRMADO: RAE

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  4. Para mí unas cosas son erratas o descuidos (dónde, enfocándolo, cómo) y otras errores ortográficos (moviliario). Sinceramente no creo que sea lo mismo

    FIRMADO: RAE

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  5. Creo que lo que se expone en esta teoría es totalmente cierto ya que por naturaleza el hombre tiende a descuidar lo que se tiene.
    Un ejemplo claro que he encontrado, es cuando quedan urbanizaciones en la costa sin terminar y se quedan años sin terminar.
    Al principio se quedan igual pero poco a poco comienzan los desperfectos hasta que se terminan por destruir.

    Alejandro Calatayud Rodriguez
    De la misma manera ocurre con el mobiliario urbano (bancos,farolas...)

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  6. Son muchas las moralejas de esta teoría de las ventanas rotas, pero en lo que a nosotros se refiere, creo que la más importante tiene que ver con la importancia de transmitir a la población el mensaje de que hay alguien que está a cargo (de la ciudad, de un barrio, etc), alquien que controla y a quien le importa. Un ejemplo en Ciudad Real: por qué no hay graffitis en los edificios blancos de la universidad? Porque cada vez que aparece uno, al día siguiente ha sido borrado con una capa de pintura. Tambien podríamos debatir el problema del aparcamiento en Ciudad Real, o las bicicletas de alquiler del ayuntamiento (como contraejemplos del anterior). Lo último que yo he oido sobre el tema es el libro: " The tipping point: How little things can make a difference" del americano Malcolm Gladwell, una especie de ensayo sociológico, que a alguno le puede resultar interesante. Maddi

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